Todos los amantes se besaron en mi alma,
todos los vagabundos durmieron un momento encima de mí,
todos los despreciados reposaron un momento en mi hombro,
cruzaron la calle, de mi brazo, todos los viejos y los enfermos,
y hubo un secreto que me revelaron todos los asesinos.
Alvaro de Campos
28 Rue Manin - Giovanni Mirabassi